Por EntreLineasMx
En un país donde el acceso a la vivienda sigue siendo un desafío estructural, Nayarit ha comenzado a marcar diferencia. A través del Instituto Promotor de la Vivienda de Nayarit (IPROVINAY), la administración estatal ha logrado avances concretos en favor de las familias más vulnerables, con resultados que hoy son ejemplo de política pública con enfoque social.
Al frente de esta estrategia se encuentra el Mtro. Manuel Martín Fonseca Altamirano, Director General de IPROVINAY desde enero de 2023. Su gestión ha estado marcada por un enfoque cercano a la gente, transparente y eficaz, centrado en atender a quienes históricamente han sido excluidos de las políticas de vivienda.
Más allá de construir casas: construir dignidad
Con el programa Vivienda Digna para Personas en Extrema Pobreza, el gobierno estatal ha impulsado acciones específicas para combatir el hacinamiento, la inseguridad estructural y la falta de servicios básicos. Se han edificado pisos firmes, cuartos adicionales, baños y techos de concreto, todo bajo criterios de funcionalidad, habitabilidad y justicia social.
“El derecho a una vivienda adecuada no es solo tener un techo, es tener un lugar seguro, saludable y propio. En eso estamos trabajando día a día”, ha expresado Fonseca Altamirano en entrevistas recientes.
Este programa ha llegado principalmente a zonas rurales e indígenas, donde las condiciones de pobreza son más severas. Las familias beneficiarias no solo acceden a una mejora física, sino a una nueva oportunidad de arraigo, estabilidad y desarrollo.
Transparencia y gestión responsable
Otro de los sellos distintivos de esta etapa del IPROVINAY ha sido la gestión transparente de los recursos públicos. En coordinación con la Secretaría de Administración y Finanzas, los fondos destinados a vivienda se han ejercido con apego a normativas y con procesos claros de asignación, lo que ha fortalecido la confianza ciudadana en el programa.
Colaboración con la federación y visión a futuro
El estado también ha establecido vínculos sólidos con la federación, particularmente con la SEDATU, sumándose a los objetivos del Programa Nacional de Vivienda. Esta sinergia ha permitido alinear acciones estatales con la política nacional de vivienda basada en derechos humanos y sostenibilidad.
Aún hay mucho por hacer. El rezago habitacional persiste, sobre todo en comunidades alejadas y zonas marginadas. Sin embargo, los avances logrados en estos años son una señal de que cuando hay voluntad política, liderazgo técnico y cercanía social, las soluciones son posibles.
Una vivienda transforma una vida
El acceso a la vivienda es mucho más que un bien material: es el punto de partida para el bienestar, la salud, la educación y la paz. En Nayarit, esa convicción se está traduciendo en acciones concretas.
Con estrategias como las impulsadas por el IPROVINAY y el liderazgo de funcionarios comprometidos como el Mtro. Manuel Martín Fonseca Altamirano, el estado avanza en el camino correcto: el de garantizar que cada familia nayarita pueda vivir con dignidad, seguridad y esperanza.
